No todo lo que brilla es oro

Hace varios dias que publique la primera entrada en el blog, por lo tanto se produjeron nuevos acontecimientos en mi vida que seguramente el lector estaba esperando. Ego aparte, el jueves pasado me llamaron de varias empresas para tener entrevistas, dos de ellas las tuve ese mismo día, en la primera el trabajo consistía en ser promotor de una empresa de viajes de egresados y la remuneración eran las comisiones más los viáticos, la segunda entrevista, la cual tuve 1 hora más tarde, fue en una pequeña empresa de informática, el puesto de trabajo era el de un ejecutivo de ventas u oficial de nuevos negocios (me tendría que pasar 8 horas al día buscando clientes a través de internet u otros canales de ventas), la remuneración era bastante elevada (esto lo digo con conocimiento del mercado laboral actual para un pibe que recién termina la secundaria y no tiene experiencia laboral ) Queridos lectores ustedes posiblemente me hubiesen dicho : “che laburante, ponete a trabajar en la empresa de informática y dejate de joder, el otro trabajo es una bosta encima te pagan con comisiones…”. Finalmente me decidí por empezar a trabajar en una de ellas al día siguiente… EN CUÁL??... lamento decirles que no seguí sus consejos, me deje llevar por la imagen corporativa de cada una de las empresas. El edificio de la empresa de informática se hallaba en un barrio de clase media-baja de la capital, además las instalaciones dejaban bastante que desear. El edificio de la empresa de viajes, está en uno de los barrios más caros de la ciudad (me parece que es el más caro ejemejem), las oficinas estaban en excelentes condiciones, mucha gente joven contenta, etc. Podríamos decir que me compró la fachada de la empresa.

Al día siguiente, me levanto bien temprano, me baño, me visto, desayuno y me voy a una esquina céntrica de la capital donde me juntaría con chicos que ya trabajaban hace bastante en la empresa y me explicarían en detalles de que trataba el trabajo. Llego a la esquina y me encuentro con 2 chicos, parecían medios distantes y no muy sociables, nos quedamos unos minutos viendo pasar la gente. Uno de los chicos al que llamaremos Nicolás, me dice de ir a un colegio para hacerme una demostración práctica del trabajo, llegamos al colegio y Nicolás les pregunta a unas chicas si son de 5to año, ellas responde que si, y en ese momento Nicolás deja de ser el mismo y se convierte en una maquina creada para vender viajes de egresados cueste lo que cueste, luego de aproximadamente 15 minutos nos vamos del colegio, vamos a otro, Nicolás le pregunta a unos chicos si son de 5to estos le responden que sí, y la maquina comienza de vuelta a recitar su speech de ventas.

Finalmente, Nico, otros chicos y yo nos juntamos en una nueva esquina del centro porteño, ellos hablan sobre las novedades del día, yo, con la mirada distante, pienso si éste será el trabajo indicado para mí.

Pasó el fin de semana a pura joda, ya es lunes y resignándome a buscar un nuevo trabajo, sigo con el que ya tengo. Me encuentro con los chicos en el centro y nos separamos en grupos para ir a distintos colegios, pasan los minutos y me pregunto que hago allí, me dejo llevar por la manada de robots sedientos de jugosas comisiones, podría decir que su lema es “el fin justifica los medios” (vender a toda costa). Pasó el día. Estaré perdiendo el tiempo?

Martes a la mañana, me levanto sin animo y me voy para la esquina robótica, me encuentro con Nico y una chica, mientras íbamos hacia uno de los colegios, le pregunto a Nico que tenía que decirles a los alumnos de los colegios para poder vender los viajes, él me dice que no importaba lo que les dijera, no importaba si era mentira o verdad, “que la vaya remando”. Al final del día me doy cuenta de que éste trabajo no es para mí. Pero aprendí 2 cosas:

-Estos chicos no tienen ni escrúpulos ni moral, hacen y dicen lo que sea para que los chicos firmen con la empresa a la que representan, y así ganarse su sueldo.

-Finalmente, me di cuenta en carne propia de que no todo lo que brilla es oro, lo tendré en cuenta para la próxima.